"Escribir es como una droga. Se empieza por puro placer y acabas organizando tu vida como los drogadictos, en torno a tu vicio." Esta frase del escritor portugués Antonio Lobo Antunes me llevó a reunir los testimonios de más de cincuentaescritores de diferentes épocas y países sobre su quehacer literario en Gajes del oficio. La pasión de escribir.
El lector dispone ahora de estas confesiones en forma de libro, páginas por las que pasan la decisión de dedicarse a la literatura, el deseo de narrar una historia, el miedo al fracaso, la obsesión ante el papel en blanco y, en fin, los demonios interiores que suelen perseguir a los escritores. Leer las confidencias de Así escribo nos revela que dedicarse a la literatura no representa, como la gente comúnmente cree, una vida de libertad y placer. El escritor tiene que luchar continuamente con su voz interior.