Aquel dĂa me habĂan invitado a una conferencia, era en una sala en la primera planta de un gran edificio al lado del colegio donde me habĂa formado. Para mĂ aquello era una alegrĂa, volver por aquel barrio en el que habĂa pasado buena parte de mi infancia.
Si bien ahora vivĂa en otro barrio, por lo que este me quedaba relativamente retirado, de ahĂ que me sintiese a gusto por volver a verlo.
Momentos antes de la conferencia, y una vez localizado el local donde se iba a impartir me dirigĂ a mi escuela, la cual no habĂa cambiado demasiado, salvo por unos azulejos que habĂan puesto en la parte de fuera de la entrada del edificio que reflejaban la vida de su fundador.
Una vez frente a la puerta revivĂ parte de mi historia allĂ parado, los momentos buenos que habĂa pasado en aquella instituciĂłn de la que por cierto me habĂan nombrado responsable de las llaves.