La novela se desarrolla entre la primavera y el verano de 2014 en Donetsk. Situado en el este de Ucrania, el Donbás es el epicentro de los acontecimientos. En esta región fronteriza con Rusia numerosos manifestantes tomaron sedes gubernamentales proclamando de facto la independencia, lo que causó fuertes enfrentamientos armados entre nacionalistas, europeístas, prorrusos y separatistas. Es aquí donde Elfa, la heroína sin nombre de la novela, pierde a su familia, su hogar y su trabajo y donde su realidad se desmorona. Es aquí donde reúne los fragmentos de su antigua vida, descubre un nuevo significado para ella y encuentra nuevos aliados. Paso a paso, el lector observa el proceso de transformación de Elfa, su metamorfosis de presa a cazadora.
Los sucesos e historias que aparecen en Hija de Donetsk no son ficticios. Proceden de las vivencias de la autora y de las personas a las que conoció mientras trabajaba de voluntaria colaborando con el Ejército ucraniano.