En esta obra se aborda un capítulo de la historia de las matemáticas, haciendo énfasis en un periodo de veinte años: la última década del siglo XIX y la primera del siglo XX. Particularmente se concentra la atención en el desarrollo de la teoría de funciones discontinuas mediante la cual se abre la perspectiva de la teoría de funciones como disciplina matemática. Para ello se toma como referencia la obra del matemático francés René Baire (1874-1932), especialmente su tesis doctoral de 1899: Sur les fonctions de variables reélles, en la cual se define su famosa clasificación de funciones discontinuas, conocida como las clases de Baire. Se describe la manera como Baire desarrolla un dispositivo teórico que permite el reconocimiento de lo discontinuo como objeto matemático. Igualmente se estudian algunos antecedentes importantes que actuaron como catalizadores y se detalla la influencia de los desarrollos de Baire, especialmente en las investigaciones del matemático, también francés, Henri Lebesgue (1875-1941), sobre las funciones representables analíticamente. Al final se detalla la controversia filosófica que enfrentó a Baire, Borel y Lebesgue de un lado, y Hadamard, del otro, sobre el tipo de existencia de los objetos matemático.