En "Resurrección", León Tolstoi presenta una potente narrativa que explora la redención y la moralidad a través de la vida de Nekhlyudov, un noble que se enfrenta a las consecuencias de sus acciones pasadas. La obra se sitúa en la Rusia del siglo XIX, donde Tolstoi aborda diversos temas como la clase social, la injusticia y el sufrimiento humano, empleando un estilo que combina el realismo psicológico con una profunda reflexión filosófica. La prosa de Tolstoi, caracterizada por su claridad y profundidad, invita al lector a cuestionar las normas morales de su tiempo. Este contexto literario es fundamental, ya que en el zenith del realismo ruso, Tolstoi se centró no solo en el individuo, sino también en el tejido social que lo rodea, creando así una crítica incisiva del sistema judicial y de la moralidad de las élites. León Tolstoi, una de las figuras más influyentes de la literatura universal, escribió "Resurrección" como un reflejo de sus propias vivencias y creencias, especialmente tras su conversión espiritual en la última parte de su vida. Sus experiencias personales, su compromiso con la paz y su visión de la vida sencilla influyeron en su deseo de abordar los temas de culpa, perdón y transformación espiritual en este trabajo. Tal sentido de búsqueda y autocrítica permea la obra, convirtiéndola en un testimonio profundo del conflicto moral de su época. Recomiendo encarecidamente "Resurrección" a aquellos que buscan una comprensión profunda de la condición humana y la lucha por la redención. La obra no solo es un hito en la literatura rusa, sino que también ofrece una meditación sobre temas universales que resuenan en la actualidad. Los lectores descubrirán en sus páginas no solo una historia cautivadora, sino también una invitación a la reflexión sobre nuestras propias decisiones y el camino hacia la salvación.