Se erige sobre el propósito de contribuir a la configuración de una teoría de pensamiento que dé cuenta de la especificidad del diseño de cara a los modelos culturales contemporáneos, a las actividades humanas y pragmatismos objetuales. A lo largo de sus páginas, el lector encontrará una rigurosa reflexión sobre una teoría del diseño que se construye en el proceso mismo del hacer, pues el diseño, visto como proceso de creación, es parte fundamental del proceso de cognición. Entre otras variables culturales, ambientales o sociales, el diseño debe tener la capacidad de cartografiar las rutas planteadas por nuestra mente; contar con amplios conocimientos sobre el tema que se va a investigar e infinita perseverancia para no claudicar ante las preguntas esenciales de cualquier proyecto de investigación. Este libro, entonces, es una herramienta útil en los procesos de investigación-creación en el ámbito del diseño y sus múltiples relaciones con la sociedad y la cultura.