La desheredada, una novela de Benito Pérez Galdós perteneciente al grupo de novelas que él mismo denominó «Novelas españolas contemporáneas». Estas obras reflejan fielmente la sociedad del momento. En ellas son continuas las referencias a los hechos políticos de entonces, creando un universo novelesco que reaparecerá en casi todos los títulos.
La desheredada presenta la caída social de Isidora Rufete. Pretende heredar un marquesado y termina ejerciendo la prostitución, peldaño final de una degradación progresiva y dolorosa.
Galdós publicó este libro en 1909, a los 66 años de edad. Sin embargo, los sucesos que relata tienen lugar treinta y tantos años antes, en el tiempo de la crisis de la Primera República.
La peripecia de la novela está entrelazada con los avatares históricos casi como una alegoría de las ínfulas aristocráticas de Isidora Rufete. Isidora siente fascinación por el lujo superfluo, menosprecia la clase social en que se ha criado y es ejemplo de la falta de sentido común.
Algunos estudiosos de Galdós han querido ver en la trama de La desheredada la influencia de Madame Bovary de Gustave Flaubert.
Isidora Rufete sufre de bovarismo. Sin embargo, mientras Emma Bovary se dejaba llevar por la ilusión burguesa de llegar a ser una dama parisién, la española delira por vivir como una aristócrata en Madrid, a causa de su convicción de que es la hija de una marquesa tempranamente fallecida.