«Ahora las reglas las pongo yo», le dijo Kit Walker, el jefe nuevo. Pero la que mandaba era Alexandra. ÂżQuiĂ©n pensaba Kit que era? El heredero acababa de llegar y ya querĂa mandar, pero si Alexandra lo sorprendĂa comportĂĄndose mal, su padre lo desheredarĂa. ParecĂa fĂĄcil, Âżno? No cuando la quĂmica entre ambos era irresistible. IronĂas del destino, tenĂan que desarrollar una aplicaciĂłn de citas juntos. ÂżPodrĂa ser Ă©l la pareja perfecta? ÂżO tal vez el escĂĄndalo perfecto?