En esta compilación se reflexiona sobre una variedad de fuentes documentales y visuales que los historiadores tienen a su alcance. Los textos compilados no solo muestran los caminos que se abren a partir de expedientes, manuscritos, periódicos, películas, juguetes, mapas, fotografías, comics o pinturas, sino también los desafíos, las dificultades, los cuidados y las diversas maneras en que estas fuentes pueden ser estudiadas por medio de complejos procesos de búsqueda y la correspondiente formulación de preguntas y problemas que le conciernen al historiador en su investigación. Por esto, en vez de mostrar grandes postulados eruditos del estudio de las llamadas fuentes primarias, aquí se opta por presentar artículos que destacan la experiencia investigativa de los historiadores al sumergirse en el estudio de fuentes históricas. Un estudio que parece sencillo, enmarcado dentro de la disciplina histórica y otras áreas de las ciencias sociales y humanas, que buscan comprender las sociedades del pasado y del presente, pero que al emprenderlo se devela como un camino lleno de complejidades y múltiples laberintos sobre el que pocas veces reflexionan los propios investigadores