A inicios de la década de 1920 Ramiro Guerra escribió esta Historia de Cuba. Este libro recoge la historia de las culturas aborígenes, la formación y evolución de la nación hasta los albores de la república. El proyecto quedó inconcluso, pero los dos tomos publicados ―hasta 1607―, representaron un trascendental avance para la historiografía cubana.
La búsqueda de indicios de una gestación nacional en aquella temprana etapa colonial, motivó al historiador a la consulta de nuevas fuentes. Estas llevaron su análisis más allá del tradicional acontecer político, para considerar fenómenos sociales y económicos usualmente descuidados. Ramiro Guerra hurgó entonces en la «historia profunda» que estimaba esencial para hallar los embriones de la comunidad cubana.
Sus libros
- Azúcar y población en las Antillas,
- Manual de Historia de Cuba
- y Guerra de los diez años son textos clásicos de los estudios históricos cubanos. En el prólogo a este último libro, Ramiro Guerra expresó:
«Un país no podrá tener jamás una historia, sino muchas historias.»