Las preguntas que Dios nos hace nos ayudan a saber lo que estĂĄ en su mente y corazĂłn. Proveen oportunidades para que aprendamos a descubrir lo que Dios nos harĂa ser y hacer. En este libro, serĂĄ Dios el que pregunte y aguarde una respuesta. Pero asĂ como los profesores no toman exĂĄmenes de lo que no han enseñado, asĂ JesĂșs, el gran Maestro, tiene la respuesta clave para una vida abundante. Ănete a AdĂĄn y Eva, a ElĂas, a MoisĂ©s, a Pedro, a Juan y a todos los demĂĄs mientras encuentran respuestas para las preguntas de Dios. Luego, con oraciĂłn, respĂłndelas por ti mismo.