En esta obra, el autor analiza aquello que el notable diálogo entre Schmitt y Strauss pone de manifiesto sobre las posiciones de estos dos pensadores seminales. Sostiene Meier que aquel intercambio sólo aparentemente gira en torno del liberalismo, ya que, en lo esencial, ese "diálogo oculto" explora el conflicto fundamental entre la teología política y la filosofía política, entre revelación y razón y, en última instancia, alude a la cuestión esencial de cómo los seres humanos deben vivir sus vidas.