Con El cetro de flores María del Pilar Sinués quiso legarle un libro a las y los adolescentes de su tiempo (mediados del siglo XIX), preocupada por las filosofías que pudieran convencerlos de una mirada cínica hacia la vida y los sentimientos.
En las afueras de un castillo toledano, vecino a la ficticia aldea de San Simon, un viajero fatigado y misterioso se encuentra con Golondrina, una niña de once años que se inquieta al verlo semidormido y a la intemperie.
La remoción de un pasado que se creía extinto les deparará cruces de caminos imprevistos a un rosario de personajes tensionados por formas del bien, que la autora siempre asocia al amor puro, y las del mal, vinculadas a la indolencia del dejarse vivir.
María del Pilar Sinués (Zaragoza, 1835 - Madrid, 1893) fue una escritora española, autora de más de sesenta novelas y otros textos muy leídos en la segunda mitad del siglo XIX.
Sinués consagraba sus trabajos principalmente a un público femenino. Durante mucho tiempo predominó en ellos un registro didáctico ligado a las tareas domésticas. Sin embargo, no se ajustó a tales expectativas ni en su vida personal, signada por una independencia cada vez mayor, ni en la construcción de las protagonistas más complejas de sus novelas.
Participó en diferentes círculos literarios y culturales.
Dirigió las revistas El ángel del hogar y Flores y perlas, la última, fugaz, con una redacción íntegramente compuesta por mujeres.
Algunos de sus principales libros: Fausta Sorel (1861), El sol en invierno (1863), El becerro de oro (1875) y el epistolario La vida íntima (1876).