La herramienta ideal para que familias y educadores desarrollen la inteligencia filosófica de los niños
Los niños tienen una extraordinaria capacidad de asombro y una curiosidad prácticamente ilimitada, dos cualidades que los convierten en pequeños grandes filósofos. El niño filósofo es una herramienta clave, tanto en casa como en la escuela, para potenciar esta inteligencia filosófica que les permitirá desenvolverse como ciudadanos activos y comprometidos.
El libro está organizado en dos partes: la primera parte nos invita a considerar los beneficios que la educación filosófica puede conllevar en el desarrollo intelectual, personal y social de los niños. La segunda parte plantea doce grandes preguntas, legado de doce importantes pensadores de la tradición occidental, y propone ejercicios prácticos para que familias y educadores puedan abordarlas con los niños desde la crítica, el diálogo, el juego y la creatividad.
Mmm...
¿Debemos actuar con la cabeza o con el corazón?
Platón
¿Cómo podemos decidir lo que está bien?
Aristóteles
¿El placer debe ser el fin último de nuestros actos?
Epicuro
¿Debemos tener miedo a la muerte?
Séneca
¿Cómo se puede conseguir la alegría?
Spinoza
¿Es importante tener buenos amigos?
Montaigne
¿Para qué sirve la educación?
Rousseau
¿Qué debemos hacer?
Kant
¿Hay que ser creativo para vivir?
Nietzsche
¿Hay que opinar sobre todo?
Wittgenstein
¿Qué es la maldad?
Arendt
¿Es más importante tener o ser?
Fromm