No las necesitamos; hoy contamos con otras formas para iluminarnos, perfumar o decorar el ambiente. Algunas, mucho más eficientes. ¿Qué nos hace seguir usando velas? Marisa Villanueva arriesga una respuesta: quizás sea porque la tenue llama que tiembla en el pabilo propicia la conexión emocional; quizás, porque son un elemento artístico y artesanal capaz de transformar cualquier espacio. Lo cierto es que, en este mundo apurado y ávido de productividad, las velas nos detienen y nos exhortan a conectarnos con nuestro lado ancestral.
Las páginas de Velas que iluminan. De la soja a la sofisticación gourmet son la consecuencia del camino espiritual de Villanueva. Aquí explora el arte de las velas: sus orígenes históricos, su creación como objeto artístico... El corazón del libro, sin embargo, se encuentra en las recetas y fórmulas que nos brinda para explotar nuestra creatividad y embarcarnos en la creación de este objeto que nos permite sumergirnos en nuestra emocionalidad.