Los trabajos que articulan este libro centran su atención en la actuación de diplomáticos, cónsules y agentes culturales del mundo español y americano que ejercieron su actividad en el arco cronológico que discurre entre 1880 y 1939. A través de lecturas diferentes, según la singularidad de cada uno de los casos, pero desde coordenadas comunes que atienden a construir la dimensión social, económica y cultural de iniciativas que suponen alternativas a la alta política interestatal de carácter oficial, se trata de abordar algunos de los caminos cruzados que siguieron a los intercambios entre España y América durante un período en el que emergieron y evolucionaron ideologías nacionalistas, regeneracionistas y americanistas.
Entre las diferentes posibilidades de análisis se ha optado por desentrañar algunos de los engranajes de la actividad que desarrollaron algunos diplomáticos, cónsules y agentes culturales que se integraron en plataformas oficiales y privadas desde las que se cimentaron vínculos que variaron según los casos y en los que influyeron la centralidad de sus ubicaciones y el grado de proyección de su actividad. No presenta un conjunto de biografías yuxtapuestas ni es un compendio de casos puntuales e inconexos. Obedece a un proyecto de largo aliento que, partiendo del diverso legado historiográfico, se adentra por caminos poco transitados que permite avanzar en la construcción de un modelo explicativo de cómo, donde la política no alcanzaba, se trabajó por la renovación de las relaciones entre España y América.