Una boda.
Un montón de chupitos.
Un Porsche aparcado en una calle oscura.
El mejor amigo del novio.
El hombre con el que no debÃa acostarme.
El que iba impecablemente vestido con un traje gris y una camisa blanca almidonada.
El dueño de unos ojos verdes que hablaban más que su irresistible boca.
El socio más joven de su despacho de abogados.
El mejor hombre con el que he estado en la cama.
Una locura.
Las huellas de mis uñas en el salpicadero de su coche como prueba.
Un problema de los grandes.
Él era inalcanzable.
Yo estaba rota.