Con la apariencia de narrar un viaje familiar, la protagonista de esta obra va describiendo paisajes y formas culturales que invitan a escarbar en las realidades comparadas de Europa y América Latina.
Curiosidad que vence el temor, humor y amor son ingredientes que sazonan la primera parte de este libro.
La segunda parte de Bitácora de viaje expone el itinerario del virus del covid-19 y el recorrido interior de su protagonista, a quien el acorralamiento físico de las cuarentenas impulsó por los caminos del pensamiento, la investigación, la imaginación y la reflexión para ponerle su firma a una narrativa íntima y social, de amor y de denuncia… con un lugar especial para la esperanza.