Según la sabiduría antigua, desde tiempos inmemoriales el oráculo de Delfos era el ombligo del mundo. Situado entre el Parnaso y el Golfo de Corinto, sacerdotes, peregrinos y políticos discernían el pasado, el presente y el futuro de la antigua Grecia y más allá de sus confines. Los oráculos, como las prácticas adivinatorias en general, constituían un elemento vital en el cotidiano de la cosmopolítica griega. A partir de un exhaustivo estudio sobre la historia intelectual moderna de la adivinación como superstición y pensamiento irracional, este libro se ocupa de revisar los sesgos eurocéntricos y cristianos que delimitaron el entendimiento sobre una de las instituciones centrales del mundo antiguo.
Tal como lo muestra el profuso análisis de diversas fuentes, Bartoletti reflexiona cómo lo humano y lo cósmico se encarnaban en cada pronunciamiento délfico, en cada sacrificio y en cada ofrenda ritual. Trazando una lectura a contrapelo en más de dos mil años de debates teológicos, filosóficos y antropológicos, esta obra indaga en el tiempo profundo de las categorías sobre lo divino, lo natural y lo político que han dado forma al mundo moderno imperialista. Una mirada subvertida del oráculo de Delfos y de su recepción moderna, como así propone esta investigación, permite explorar los sentidos enigmáticos del mundo antiguo y los desvíos que han tomado en conflictos teológicos y epistemológicos del tiempo presente sobre los difusos límites entre política y naturaleza.