Estimado lector, en este libro encontrarå once relatos testimoniales de personas que transitaron el duelo por muerte de seres queridos y que son coordinadores del Grupo de Mutua Ayuda "Resurrección" de la Pastoral del Duelo, donde se acompaña a los dolientes por un tiempo prolongado, con una visión personalista, en un ambiente de comunidad y considerando las seis dimensiones båsicas de la persona: corporal, emocional, mental, social, valórica y espiritual.
A estos coordinadores les propuse que escribiesen su testimonio de vida en torno a un tema bien definido: "Cómo coordinar el Grupo "Resurrección", acompañando a dolientes, lo ha ayudado y enriquecido a nivel de las seis dimensiones de su persona".
El tĂtulo del libro: "Si curas la herida de tu hermano" -inspirado en el capĂtulo 58 del profeta IsaĂas, y concretamente en el versĂculo 8: "Entonces tu luz surgirĂĄ como la aurora y tus heridas sanarĂĄn rĂĄpidamente"-, y el subtĂtulo: "La mutua ayuda en duelo", han orientado la redacciĂłn de su contenido.
Por supuesto, todo lo vertido en estas lĂneas tiene destinarios y objetivos precisos: orientar a los lectores en la elaboraciĂłn de su duelo y proporcionar recursos para quien ejerce en este campo la relaciĂłn de ayuda. En el relato de los coordinadores Sergio y Diana, que trabajaron el duelo por la muerte de su Ășnico hijo electrocutado, se explicita clarividentemente la finalidad de este libro: "No ha sido escrito para hacer un homenaje a la memoria de nuestro hijo, ni para dar a conocer las penurias del recorrido de nuestro duelo. ÂĄNo! Su finalidad es ser un aliciente para usted, que puede que estĂ© transido de sufrimiento en este momento de su vida o acompañando a otros dolientes. Le rogamos que nos haga el regalo de aceptar este escrito como una prolongaciĂłn de nuestro ministerio de coordinaciĂłn, para que sea un instrumento Ăștil para su camino de sanaciĂłn".
En cada pĂĄrrafo, acopio de una vivencia sufriente muy intensa por muerte de seres queridos, un camino de duelo transitado y una experiencia de coordinaciĂłn en los Grupos de Mutua Ayuda en Duelo "ResurrecciĂłn", el amable lector hallarĂĄ una riqueza inconmensurable de contenidos valiosĂsimos para elaborar, integral e integradamente, mĂĄs acertadamente los duelos "sin bastĂłn de ciego", como afirma la coordinadora Carmen.
A su vez, los coordinadores ponen de manifiesto el valor terapĂ©utico de los vĂnculos relacionales, la fuerza sanadora de la mutua ayuda, y el poder auto curativo que se despierta en los buenos samaritanos y cireneos que acompañan, al estilo de JesĂșs, a los que estĂĄn con la herida abierta en el camino del duelo.
Considero que estas pĂĄginas evidencian que en el ayudar "no basta con dar hasta que duela", sino que hay que "darse desde el mismo sufrimiento": el ayudar mĂĄs genuino, puro y enriquecedor. Por ello, "Darnos desde el sufrimiento a otros sufrientes es un camino asegurado de sanaciĂłn", como manifiesta Elvira; y un camino de enriquecimiento para todas las facetas de nuestra vida, como escribe Sandra: "Ayudando, uno nunca retorna a casa con las manos vacĂas".
A muestra de botĂłn, leamos lo que nos transmite la coordinadora Susana, que elaborĂł el duelo por el asesinato de su hijo y lo puliĂł gracias a su ministerio de coordinaciĂłn: "Si hay depositado en tu corazĂłn veneno por una ofensa gravĂsima, sĂłlo con el perdĂłn comerĂĄs el fruto de la paz y de la felicidad. El perdĂłn es la mayor inteligencia de la vida, que todo lo recrea y sana. Te lo dice una madre que pudo rescatarse del veneno de la infecciosa bronca, para encontrarse con el abrazo que le faltaba".