Que la vida se disfruta más cuando la vives A flor de piel. Así nos lo demuestran estas páginas que contienen algo más que poemas, contienen una vida entera de sentimientos, de emociones, de experiencias, de tristezas, de penas, de alegrías, de amor… Poemas valientes, a veces desgarradores, cantos a la vida y a la muerte, al dolor y a la alegría; cantos al romanticismo, a la maternidad, a la familia, a una vida repleta de amaneceres inolvidables, confidencias con la luna y recuerdos inolvidables de la niñez.
La pareja, los hijos, los nietos, los padres, los abuelos, todas esas personas que nos inspiran y que nos enseñan; que nos dan la mano en este camino que es la vida. Esa mano amiga que nos lleva cuando las cosas se ponen difíciles, la mano que tendemos a los que queremos, las ausencias, las presencias, el amor verdadero; los sueños propios y ajenos. La vida va pasando, pero se puede plasmar en palabras que quedarán para el recuerdo.