Las casas exhibidas proponen modos diversos de relacionarse con el mar y su entorno. Nos cuestionamos cĂłmo aprovechar respetuosamente la singularidad del lugar, cĂłmo colonizar el espacio, cĂłmo diseñar aspirando a mimetizar la materialidad con un contexto natural impactante a travĂ©s de sofisticadas formas de construcciĂłn. AsĂ, encontramos nuevas tecnologĂas que conviven con los materiales tradicionales redescubiertos, en un doble juego de contraste y sensibilidad con respecto al paisaje. La voluntad de relacionar la Arquitectura contemporĂĄnea con el ambiente, el cruce de estĂ©tica y vanguardia, las exigencias ambientales y econĂłmicas, obligan al arquitecto a investigar y experimentar con materiales naturales. Algunas casas tienen en cuenta las referencias de la tradiciĂłn agrĂcola local que durante siglos ha transformado la aridez mediterrĂĄnea, formando terrazas fĂ©rtiles protegidas de la erosiĂłn que retienen el agua de lluvia, gestionando de manera cuidadosa dos elementos esenciales y crĂticos: el agua y la tierra. Deben explorarse, entonces, los beneficios de vivir en un medio tan privilegiado pero de condiciones extremas, cuyo clima presenta serias dificultades que no deben perjudicar la confortabilidad. Se abren las terrazas desde las cuales contemplar el mar, los atardeceres. Vistas cruzadas y transparencias entre las salas, el patio, las terrazas y la pileta. Se busca diluir los lĂmites entre interior y exterior, con espacios flexibles que cambian de funciĂłn a lo largo del dĂa, una luminosa secuencia de espacios que atraen hacia el interior el sol de la tarde, resguardan de la lluvia y de la candente luminiscencia del verano y construyen horizontes que se funden en el ocĂ©ano. En definitiva, este entornoâ atractivo e indĂłmitoâ nos plantea un desafĂo: encontrar las soluciones constructivas que menos interfieran y mĂĄs se adapten a la belleza de un escenario natural Ășnico.