En esta investigación se desarrolla el tratamiento penal y procesal penal del tráfico de drogas, la delincuencia organizada y el blanqueo de capitales, con la finalidad de comprender el gran daño que la producción, el tráfico y el consumo de drogas ilícitas están causando al mundo, donde ha dejado de ser un simple problema de orden público o de contención judicial, sino que además se ha convertido en un fenómeno económico que trasciende las fronteras nacionales, condiciona e influye en las políticas internas de los países afectados y en las relaciones internacionales entre los países en desarrollo y los países industrializados. Tanto España, como país de Europa, y Venezuela, como país de América Latina, sufren en la actualidad, las consecuencias históricas del nacimiento, desarrollo y propagación del fenómeno de las drogas. De acuerdo con numerosas investigaciones ambos países constituyen puentes del narcotráfico internacional en sus regiones, básicamente la ubicación geográfica de ambos los convierte en territorios apetecibles para las organizaciones que se dedican al tráfico internacional ilícito de drogas. Debido a esta problemática, se analizó la tipicidad del delito de tráfico de drogas y su aplicación procesal en España y Venezuela, donde por su connotación organizativa y transnacional, se dirigió el estudio al terreno de la delincuencia organizada, siendo este tipo de delincuencia la evolución de una criminalidad asociada a la marginalidad del individuo, hacia una criminalidad desarrollada por estructuras de corte empresarial. Dentro de esta evolución, la criminalidad organizada obtiene importantes beneficios económicos, y habitualmente un gran poder económico cuando se vincula al tráfico ilícito de drogas. El delito organizado es un fenómeno complejo que se nutre de las discontinuidades culturales propiciadas por la globalidad. Por este motivo, para su investigación penal es necesaria la utilización de técnicas especiales como: el agente encubierto y la entrega vigilada. La cooperación internacional es fundamental para poder combatir la delincuencia organizada entre los distintos países y sus diferentes ordenamientos jurídicos, ya que este tipo de criminalidad comienza a tomar mayor poder económico, donde la transnacionalización es parte de su evolución y crecimiento que le permite traspasar todo tipo de fronteras, sujeta a desenvolverse en diferentes territorios y jurisdicciones. El blanqueo de capitales se estudió en el marco de la lucha contra el narcotráfico internacional, dado que la delincuencia organizada necesita limpiar el dinero ilícito para colocarlo en un mercado y sistema lícito, que les permita disfrutar de las grandes ganancias que les generaron los negocios delictivos como organización. Este modelo de criminalidad organizada ha contado con la ventaja, casi la complicidad se podría decir, de sistemas legales que, por su ineficacia, por su complejidad, por su inadecuación, dejan de constituir una amenaza y, en ocasiones, se convierten inclusive en aliado de estos criminales. Solamente cuando exista una estrategia multilateral real, dotada de recursos económicos y humanos apropiados y que cuente con el sistema legal adecuado, se podrá luchar con igualdad y claridad. Mientras tanto, existen acciones meritorias, útiles, valiosas y hasta indispensables, pero no hay una estrategia global eficaz. Inmer Francisco Puerta Mijares. Profesor y Director de investigaciones en la Universidad Internacional de La Rioja (España). Reside en el Reino Unido, donde se encuentra desarrollando investigaciones académicas. Doctor en Derecho Procesal (02/2016) por la Universidad de Salamanca (España),Diploma de Grado de Salamanca con la calificación de Sobresaliente "Cum Laude" (05/2011), y Máster en Derecho (06/2007) por la misma universidad. Especialista en Derecho Penal (03/2006) por la Universidad Santa María (Venezuela).