Esto es un ensayo. Escritura que habla de objetos, otra forma de grafĂa. Objetos que sirven para contar historias, para revelarnos como historia. La reflexiĂłn surge de una evidencia: la desapariciĂłn. Hablo de un mundo virtual, pero tambiĂ©n de una instalaciĂłn material constantemente modificada. Los objetos cotidianos ya no son heredados, sino desechados, olvidados, ignorados. En este trĂĄmite, aparentemente falaz, nuestros recuerdos son desplazados. Creo percibir en ese fenĂłmeno una variante antropolĂłgica fundamental.
Intento hablar de objetos insignificantes como seres que tambiĂ©n pueblan la Tierra, como el roble, los sueños o las montañas. Por eso este material narrativo es una mezcla de recuerdos personales, anĂĄlisis antropolĂłgicos, reflexiones filosĂłficas, evocaciones cinematogrĂĄficas, datos biolĂłgicos y aproximaciones literarias. En este sentido, la figura de Tarkovski y su cine son guĂas de la exposiciĂłn. Las afinidades estĂ©ticas y metafĂsicas compartidas son evidentes: el tiempo, la memoria y el desprecio a los valores modernos.