El ciberespacio representa hoy nuestra casa global; es el sitio de nuestras relaciones, por lo que es el área de comunicación con mayores credibilidad, importancia y trascendencia.
Esta obra muestra de qué manera surge el ciberespacio, sus creadores, los efectos de la conducta criminal es esa "casa virtual", así como la forma en que se construye la "felicidad" en los cibernautas al participar en ese entorno cibernético. Presenta esquemas que evidencian los conflictos que surgen en este "nuevo mundo" y condicionan en la realidad conductas criminales. Y alerta acerca de una necesaria e indispensable toma de conciencia que conlleve a la autoprotección y a la autoprevención en todos los niveles de la "aldea global virtual", con la finalidad de promover una mejor "calidad de vida" dentro del espacio virtual.