Economía para no morir se construyó con la esperanza de que la vida del ser humano sea la defensa máxima de todas las economías del mundo, visibilizando la interacción metabólica ser humano con el planeta Tierra en la búsqueda constante de la satisfacción de aquellas necesidades.La propuesta, concebida sobre las bases del pensamiento complejo, parte del análisis y reconocimiento de las Necesidades Mínimas Vitales —NMV— del ser humano; aquellas que le garantizan su condición de vida. Así, desarrollando un enfoque holístico que redime la subjetividad con que han sido tratadas por estudiosos del tema desde distintas posturas teóricas y rompiendo la linealidad del método científico; se recogen aportes de la filosofía, la antropología, la biología, la sociología, la medicina y por supuesto la economía, para sentar las bases en la identificación y caracterización de aquellas NMV como un subconjunto de las necesidades humanas. Una vez expuestas, actúan como variables guía en la construcción metodológica de una herramienta capaz de identificar su insatisfacción para cualquier grupo humano: el Índice de Mínimos Vitales —IMV—. Apreciado lector, aventúrese en Economía para no morir, una propuesta nacida en el corazón de Liceth Cristina Ramírez y Carlos Salas Cardona y su inquietud sobre qué hacer frente a las Necesidades Mínimas Vitales.