Inglaterra, 1573. Los dĂas de la pequeña Ellyn transcurren trabajando de sol a sol en la humilde granja de su familia, paleando las heces de los animales y recibiendo los menosprecios y los golpes de su hermano Tomas. Desde que su padre quedara invĂĄlido en un accidente, y mĂĄs ahora que una nueva hermanita, Agnes, ha llegado a ese mundo de miseria y privaciones, todos han de deslomarse aĂșn mĂĄs para asegurar el sustento. En esa atmĂłsfera de brutalidad, fatiga e inmundicia, la Ășnica alegrĂa de Ellyn es Agnes, a quien la une un vĂnculo muy especial. Todo darĂĄ un vuelco inesperado el dĂa en que Ellyn acude al mercado y, empujada por la curiosidad, entra en una iglesia vacĂa en la que oye un canto como jamĂĄs habĂa oĂdo antes, un canto que la estremece, que la hace flotar. Desde ese preciso instante comienza a crecer en su interior un poderoso deseo: ingresar en la escuela de canto, donde los jĂłvenes caballeros aprenden a cantar, pero tambiĂ©n a leer y escribir, un lugar donde nunca se pasa hambre y al que sin embargo las niñas tienen vedado el acceso. La determinaciĂłn por cumplir su sueño llevarĂĄ a Ellyn a rebelarse y hacerse pasar por un chico, pero ÂżcuĂĄnto tiempo podrĂĄ mantener el engaño? ÂżCuĂĄnto podrĂĄ soportar esos grilletes impuestos a la verdad de su cuerpo? Escrita con un formidable talento para reflejar el habla de una niña criada en un entorno rural y transmitir con ese lenguaje tan personal una energĂa, una libertad y una visiĂłn de las cosas de enorme aliento poĂ©tico, La escuela de canto narra el camino sin vuelta atrĂĄs de una chica analfabeta que descubre que el mundo es mucho mĂĄs vasto de lo que jamĂĄs hubiera sospechado, un mundo bello e injusto en el que un don puede llevarte muy lejos y los prejuicios te condenan de por vida; un mundo que es preciso cambiar, sea como sea, para legĂĄrselo a aquellos a quienes mĂĄs amamos.