Esta obra expone las relaciones de confrontación Estados Unidos-Cuba durante la presidencia de Richard Nixon, cuando el pueblo cubano tuvo que enfrentar una administración muy hostil y agresiva. Este presidente pretendió tomar revancha y revertir la paz alcanzada en la nación cubana luego de la derrota de la vía armada de la guerra sucia protagonizada por la contrarrevolución interna, alentada y financiada por ese país desde 1959 hasta 1965. El libro, basado en documentos recientemente desclasificados, estudia cómo Nixon prosiguió el camino de confrontación. Denuncia los sabotajes realizados para entorpecer la economía, en particular la zafra de 1970, mediante la infiltración de mercenarios; expone los vínculos de Nixon con los grupos contrarrevolucionarios de La Florida, lo cual implica la impunidad con que realizaron sus actos terroristas. El lector encontrará aquí varios aspectos de sumo interés de las relaciones entre ambos países durante la administración Nixon.