Este libro contribuye al abordar una temática que no siempre ha tenido la centralidad que merece: los procesos de enseñanza y aprendizaje vividos en el aula. Se trata de un acercamiento al fenómeno educativo desde la historia cultural, que pretende comprender los objetivos buscados por la educación y los mecanismos implementados para conseguirlos, pero que, a la vez, intenta dimensionar empíricamente las condiciones concretas en que estas ideas buscaron ser aplicadas y avizorar algunos de sus posibles resultados. La "calidad" de esta escuela no se evaluó en puntajes de pruebas estandarizadas o acceso de sus estudiantes al mercado laboral, sino en su capacidad de lograr lo que sus dirigentes esperaban de ella: "transformar" a la población para dar sustento al nuevo proyecto político que era el Estado republicano.