A lo largo de su vida y de su labor como superior General de la Compañía de Jesús, el padre Pedro Arrupe se destacó por ser un hombre de espíritu y acción que siempre estuvo a favor de la renovación de la Compañía de Jesús y de la Iglesia Católica, en especial durante los años que siguieron al Concilio Vaticano II. Sus acciones y sus reflexiones estaban fundadas en una profunda espiritualidad evangélica que intentaba dar una respuesta eficaz a los problemas de un mundo cada vez más inmerso en el materialismo y el capitalismo.
Pensando en las nuevas problemáticas que deben afrontar la iglesia y sus fieles en el mundo contemporáneo surge este libro, en donde se ofrecen algunos escritos del padre Pedro Arrupe y se presentan aspectos importantes de su vida y su pensamiento. Textos como "Mi catedral" y "Hombres y mujeres para los demás" aún guardan plena vigencia e invitan a sus lectores a ser testigos del diálogo fecundo entre los retos que ofrece la sociedad actual y las respuestas que aporta la espiritualidad ignaciana, para poder vivir de una manera cada vez más auténtica y comprometida con la justicia social, respetuosa de la dignidad humana.