Estas pĂĄginas nos entregan experiencias e inquietudes comunes y al mismo tiempo Ășnicas, porque han sido expresadas desde una individualidad muy personal. Creo que podrĂamos afirmar, sin temor a equivocarnos, que en el centro de los poemas que integran este libro hay un erotismo hondamente vivido y de profundas raĂces, desplegado en las diferentes maneras que va asumiendo el recuerdo en la sensibilidad creadora de esta poetisa, siempre atenta, aunque no nos percatemos de ello en todo momento, al trĂĄnsito de la realidad y de las mĂșltiples impresiones que van despertando en ella al paso de su existencia cotidiana. [âŠ] Las maneras y el estilo de esta poesĂa son de una singular sobriedad, de una mesura muy grata, de una fineza que estimula en los lectores el agradecimiento. (ENRIQUE SAĂNZ)