"El París de Le Corbusier" analiza las relaciones duales entre la ciudad y el arquitecto: la dialéctica entre la ciudad real - el París donde vivía- y la ciudad ideal - el París abstracto que proyectaba-. Intenta confrontar ambos mundos para entenderlos mejor. París es ocasión para comprender a Le Corbusier; Le Corbusier es ocasión para estudiar París. Ninguno de los dos factores quiere primar sobre el otro.
Le Corbusier encarna la dinámica del siglo XX en París. Es ahí donde vive la mayor parte de su vida, donde piensa, donde escribe, donde proyecta. La ciudad de Le Corbusier es el lugar de la realidad y el lugar de la utopía. Sus propuestas: la Villa Radieuse, la Ville Contemporaine, son a la vez un gesto profético y una imagen poética.
La confluencia de sus ideales con la realidad de París plantea un diálogo enriquecedor, cuyo desarrollo se expone en este libro a través de un discurso secuencial: Édouard, Jeanneret y Le Corbusier, atendiendo al descubrimiento de París por Édouard, a la dialéctica que París, provocador de energías, establece con Jeanneret, y al París de las propuestas de Le Corbusier, haciendo de ellas una travesía poética y un encuentro vital. Pues Le Corbusier no sólo quiso proyectar la Ville Radieuse sino también vivir en ella.