En el mundo ideal, la gente se ama, perdona hasta 70 veces 7 y no juzga para no ser juzgado. Mientras tanto, en el mundo real, los amigos cercanos pueden tener envidia, los miembros de la familia difunden chismes y los menos esperados nos abandonan. El mundo real muestra que el verdadero desafĂo es gestionar al otro. Necesitas que la gente sea feliz. Invierte en ellos, aprende a ver lo mejor de cada uno y aprende aquĂ cĂłmo no esperar algo a cambio y aĂșn asĂ encontrar satisfacciĂłn y felicidad en tus relaciones. Comprender al otro es el primer paso para lograr grandes amistades y grandes acuerdos.