"Las cosas del mundo tienen sus nombres cambiados y se ha perdido la clave de los cambios", nos dice Peyrou en esta novela publicada en 1959. El protagonista, Francisco Berthier, es un viudo cuarentón que se siente descolocado del marco de referencia habitual, tras haber matado inesperadamente a un hombre en el centro de una Buenos Aires contemporánea. La mujer por la que mató, según se va revelando poco a poco, tal vez no merecía ningún sacrificio… La decisión de Berthier de confesar el crimen viene, en un comienzo, del remordimiento, y más tarde, de la sed de venganza.
Alrededor de Berthier giran las vidas de su amigo Horacio Vergara, álter ego de Peyrou que aparecerá en esta novela y en todas las posteriores, y de Eloísa, la amada en la cual el protagonista no sabe cuánto puede confiar. A todos los rodea esta ciudad que es un torbellino de inmoralidades políticas, personales, de negocios, donde los triunfadores se parecen más al marido de su amada Eloísa, un buscavidas corrupto, que al mismo Berthier.
Novela psicológica y detectivesca, novela política también, Las leyes del juego coloca a la calle Corrientes en el centro de un drama imprevisto pero casi inevitable.