Esta investigación realizada por la escritora Gilda Jiménez, parte de la experiencia personal, que adquirió y desarrolló en las enseñanzas de los cursos de oratoria, en diversos lugares, como planes vacacionales, didácticos. Estas inquietudes, que allí observó, la estimularon a elaborar este Manual de Oratoria.
Se ofrecen aquí, las herramientas básicas y necesarias que necesita conocer un orador, para que su mensaje sea captado y comprendido con eficacia.
La escritora, divide su trabajo en dos capítulos. En el primero se detiene a explicarnos lo que es la oratoria, la importancia que debe tener un buen orador para obtener resultados satisfactorios. Nos señala que lo fundamental en el hablar bien, consiste en que los destinatarios reciban y comprendan el mensaje. Insiste también, la autora en explicarnos que un buen orador debe tener conexión con la realidad, debe prepararse constantemente, asistiendo a charlas, haciendo lecturas. Porque en la oratoria no existe la improvisación. Entonces, el orador debe aprende a manejar su expresión corporal, el uso adecuado de la voz y a controlar su miedo escénico.
La escritora nos presenta técnicas fundamentales para expresarnos con claridad y corrección. Nos muestra las técnicas para mejorar la proyección de la voz, para pronunciar mejor las palabras a través de ejercicios prácticos.
En el segundo capítulo, nos deleita con sus explicaciones sobre las cualidades de la voz, entre ellas; la proyección de la voz, la flexibilidad, la velocidad y las pausa, que nos permiten manejar adecuadamente las inflexiones de la voz, el cambio de tono y de ritmo, para darle dinamismo a lo que se quiere comunicar.
En fin, la escritora nos muestra de manera fácil y comprensible, un Manual de Oratoria que nos permite hablar, hablando.
