Julia 970
Jo Montgomery no tenía nada en contra de los niños, simplemente, no quería tener ninguno. Así que cuando por una fatalidad del destino, tuvo que hacerse cargo de tres pequeños diablillos, se puso histérica. Pero lo último que ella se imaginaba era que iba a conseguir un trabajo... precisamente por los niños.
Entonces conoció al padre de las criaturas, John Sterling, un viudo muy atractivo, y Jo supo que sus problemas acababan de empezar. John era el hombre que ella había estado buscando toda su vida.