Es la hora de restaurar el honor familiar. Es la hora de culminar la venganza.
Tras el auto de fe que le ha dejado huérfano, Alonso acude a la Inclusa para recuperar a su hermano Diego, pero allà enfrenta la peor de las noticias cuando le comunican que el niño murió al poco de ingresar. Roto de pena, se apoya en sus amigos, Juan y Antonio, quienes le ayudan a superar esta nueva pérdida introduciéndole en el duro pero fascinantemundo de la picaresca.
Una noche rescatan de un atraco a don Gonzalo Soto de ArmendĂa, marquĂ©s de Velarde, quien los recompensa incorporĂĄndolos al servicio de su casa. Este nuevo vuelco en la vida de Alonso le abrirĂĄ las puertas de otro Madrid muy distinto al que conoce, el de la aristocracia; le sumergirĂĄ en un sinfĂn de aventuras y desventuras; le pondrĂĄ en el camino a personas que marcarĂĄn su futuro y tambiĂ©n su pasado, y, sobre todo, le brindarĂĄ la oportunidad de consumar su venganza y al fin restaurar el honor de los Castro.