Jaime Bunda, cuyo nombre hace referencia a la prominente anatomĂa el personaje ("bunda" en portuguĂ©s quiere decir "trasero") es tambiĂ©n una alegorĂa a James Bond, con la diferencia de que el angoleño es gordo, no usa RĂłlex y no tiene contactos en Buckingham, sino en el mercado negro de Luanda. Este ahora clĂĄsico personaje, del cual hay tofda una saga de libros, comenzĂł su carrera como burĂłcrataen el servicio secreto angoleño gracias las influencias de su primo, miembro de una familia tradicional angoleña. Sumido en el tedio burocrĂĄtico âpero gran lector de novelas policiacasâ, logra dar una vuelta a la tuerca de su cotidianidad y consigue un caso en aparencia absurdo al que torna misterioso y posteriormente crucial. De la mano de esta investigaciĂłn y de la perspicaz visiĂłn de Bunda, esta novela es una parĂĄbola de la estuctura social de Angola y, a la vez, una sĂĄtira sobre las pretenciones primermundistas de la sociedad poscolonial. Asimismo, es una de las primeras obras en desprenderse de la dominaciĂłn deontolĂłgica instaurada en la creaciĂłn literaria y artĂstica de muchos paĂses africanos en las postrimerĂas de las guerras coloniales.