DespuĂ©s de unos meses en el extranjero, el periodista Max Tremaine volviĂł a su nueva casa en las afueras, pero le abriĂł la puerta una atractiva mujer embarazada. Al parecer, la pelirroja habĂa estado viviendo en casa de Max, vaciĂĄndole las cuentas bancarias y utilizando su nombre. AdemĂĄs, "Maxine Tremaine" se habĂa convertido en un pilar de la comunidad, en la que declarĂł que Ă©l era sĂłlo el guardaespaldas que habĂa contratado para que la protegiese de su ex marido.
Viviendo como un extraño en su propia casa, Max pronto se dio cuenta de que habĂa tropezado con el mayor obstĂĄculo de su vida. La justicia buscaba a aquella mujer por algo mĂĄs que suplantar la identidad de Max. El problema era que ella, y los casamenteros del vecindario, estaban decididos a robarle tambiĂ©n el corazĂłn.