Ana es una mujer de cuarenta y cuatro años, viuda, que vive con su hija Laura, de diecinueve. Un día es despedida del trabajo en el que llevaba casi veinte años, y conoce a Julián, un hombre del que se enamora. En medio de este romance llega una carta de Grazalema con la noticia de un fallecimiento y una posible herencia para Ana. Ella deberá decidir si viajar o no a Grazalema, sin la compañía de Julián, ya que este trabaja.
Por otro lado, Laura empezará segundo de Periodismo y conocerá a personas que le harán descubrir el amor y la traición. Le harán replantearse su sexualidad y sus sentimientos, a través de diferentes acontecimientos y situaciones. Madre e hija pasarán por diversas vicisitudes, tanto juntas como separadas, que les harán tomar elecciones que cambiarán su mundo para siempre.