Estamos ante un conjunto de microficciones sobre un hombre melancĂłlico y desahuciado que llega a una cafeterĂa y comienza a narrar historias en voz alta, al tiempo que completa un crucigrama. Al inicio del libro hay un crucigrama en blanco. En lo alto de cada texto, se muestran las casillas vacĂas de las letras que le corresponden al tĂtulo. El libro propone que las lectoras y los lectores resuelvan la incĂłgnita de cada tĂtulo a partir de las pistas que ofrecen sus pĂĄginas (las respuestas aparecen al final, en el Ăndice). Cada minificciĂłn plantea paradojas y situaciones absurdas para reflexionar acerca de la existencia humana, el doble, la verdad o la relaciĂłn entre Dios y los seres humanos, en un ejercicio lĂşdico de lectura y de experimentaciĂłn con las formas narrativas, y una buena dosis de ironĂa y desenfado.