La novela más autobiográfica de Manuel Puig, la historia de un chico cuyo único contacto real con el mundo es la ficción de las películas.
Prólogo de Bob Pop
Cuando Guillermo Cabrera Infante leyó La traición de Rita Hayworth, le «cautivó no sólo su encanto oral sino ver que era una novela con páginas de celuloide: la fábrica de la trama era el cine». Relato de la vida de una ciudad de provincias en la Argentina de los años 30 y 40, el libro desvela con turbadora crudeza la alienación de una colectividad dominada por los mitos cinematográficos, y en concreto, la historia de un chico asustado que se siente distinto de los demás y que encuentra en el cine un refugio y una ventana al mundo exterior. Sobre unos y otros, planea la amenaza en la pantalla plateada de una Rita Hayworth tan mítica como traicionera con los adoradores incautos.
En un lenguaje de inigualable precisión y fidelidad al habla cotidiana, Puig narra la frustración esencial de los habitantes de un pueblo llamado Coronel Vallejos, que no es sino una recreación ficticia de su pueblo natal. Designada por una encuesta organizada entre los críticos por el periódico Le Monde como una de las cinco mejores novelas extranjeras aparecidas en el bienio 1968-1969 en Francia, estamos ante es una novela esencial por su poder evocador, su sentido de la observación directa y su maestría constructiva y ante una excelente muestra de la mejor narrativa de uno de los escritores latinoamericanos más peculiares, más ajenos a cualquier tradición literaria.