Con un llamativo repertorio de nuevas categorías en el análisis sociológico y político, el autor nos conduce en un recorrido por la ádeiocracia, la lumpenización de las élites interrcontinentales, la mudanza de la riqueza, la destrucción de la biodiversidad, tema tan cercano a su obra literaria, el feminismo y la admisión sin reservas de la diversidad, los corredores económicos y el nuevo mapamundi, sin esquivar la crítica política ni quedarse en la mera retórica de la denuncia. Y ese es su gran aporte. El trazo de un camino alterno, centrista, legítimo.
Una sugestiva reintegración por la que claman Edgar Morin con su llamado a la regeneración del humanismo y Zigmund Bauman en su planteamiento póstumo de abandonar la postura nostálgica como base del ejercicio prospectivo. Un fascinante cierre de este libro trascendental Saavedra nos invita a marchar desde la retrotopía hacia el capital ético, social y sostenible en el florecimiento del humanismo digital. Una tarea congregante y oportuna como bien lo sugiere el compacto y sustancioso prólogo del gran economista José Antonio Ocampo