A veces cumplir con el deber involucra un gran sacrificio.
Eso lo comprenderá el cabo Andrei Andreiovich Solovióv, cuando al defender con su patrulla a un humilde granjero en una confusa situación, termine degradado y condenado a 7 años en una prisión militar.
Tiempo después el mismo gobierno que lo destituyó, lo invita a formar parte de una misión de espionaje donde el futuro chivo expiatorio será nada menos que él mismo en caso de que algo salga mal.
Y los más negros presentimientos de aquel hombre castigado injustamente, terminan haciéndose realidad...
Las potencias occidentales hasta ese momento solo espectadoras, deciden enviar entonces a sus agentes a capturar información al precio que sea, aunque peligre la vida de inocentes.
MacGregor por el servicio secreto británico y Miller por la CIA americana deberán elegir entre cumplir con la misión que les han encomendado, moviéndose con cautela en un país extraño donde los extranjeros no son bienvenidos, donde cualquier integrante de una caravana puede denunciarlos por unos cuántos dólares...
Aprenderán a engañar, a internarse en los desiertos para sobrevivir o... hasta traicionar a su país.