Debajo una mañana
de un coche se encontraba
un gatito chiquitín
que maullando estaba.
Debajo una mañana
de un coche se encontraba
un gatito chiquitín
que maullando estaba.
―Miau, miau ―decía muy triste
se encontraba perdido
y allí muy quietecito
se había escondido.
―Miau, miau ―seguía maullando
pero nadie le escuchaba
todos estaban dormidos
era por la madrugada.
―Miau, miau ―seguía y seguía
y un niño le escuchó
se levantó de la cama
y la ventana abrió.