Nacido hace 51 años, curiosamente un 15 de setiembre de 1963 (día de la
celebración de la independencia de Costa Rica) y siete meses después de que el
volcán Irazú entrara en erupción en ese mismo año, pareciera no ser casualidad que
en la personalidad y formación Giovanni Peraldo Huertas, profesor universitario y, en
mi caso entrañable amigo, hermano y colega, se conjugaran desde su nacimiento,
las disciplinas que han marcado su desarrollo profesional: la geología, la geografía,
la historia y la gestión del riesgo en desastres. Todas ellas mezcladas y puestas en
perspectiva desde su pensamiento humanista y sensibilidad por el prójimo, así como
su incansable interés por las letras (las cuales, soy testigo, las caza y devora como
cualquier depredador en busca de alimento… solo que en este caso, para la mente y
el alma).
Tampoco es casualidad que ahora, luego de dos décadas de profusa producción
académica en la Escuela Centroamericana de Geología de la Universidad de Costa
Rica, Giovanni Peraldo Huertas nos hace entrega de esta obra que, a mi humilde juicio,
es representativa de un momento culminante en su trayectoria y en la cual combina no
solamente sus disciplinas de estudio, sino también los tres pilares de nuestra querida
alma mater, la docencia, la investigación y la acción social.