Una novela histĂłrica de aventuras con sabor a clĂĄsico, un viaje hacia lo mĂĄs profundo del horror y la violencia del colonialismo en Ăfrica.
Una mañana de septiembre de 1890, el topĂłgrafo belga Pierre Claes deja Leopoldville rumbo al norte con una tarea encargada por su rey. Con las estrellas como guĂa y unos pocos instrumentos, su misiĂłn consiste en trazar en la tierra la frontera norte del Congo, y asĂ, materializar lo que Europa llamaba entonces "progreso", frente al barbarismo de una tierra inexplorada, salvaje, mĂĄgica y maldita a la vez. A bordo de la Fleur de Bruges, deslizĂĄndose sobre el rĂo Congo, lo acompaña un grupo de lo mĂĄs heterogĂ©neo, en el que se encuentra Xi Xiao, un maestro del tatuaje chino que tiene visiones del futuro. Xi Xiao viaja con dos certezas: que la colonizaciĂłn es una abominaciĂłn condenarĂĄ no sĂłlo a ambos sino, a larga, al mundo occidental; y que su lealtad por el topĂłgrafo estĂĄ por encima de su propia vida.