¿Recuerdan el caminar por el trigal? ¿El sol en nuestras caras?
¿La libertad de reírse? ¿El animarse? ¿El andar juntas?... ¡Recuerden siempre eso! ¡Que son capaces, que son valientes, que son valiosas, que son especiales, que son únicas! Que son libres, que son fuertes, que sí se puede... Renacieron, renacimos, recuerden esas risas y sonrisas de hoy, ¡quisieron borrarlas y no pudieron! Las quiero y mil gracias por acompañarme y seguirme en esta locura (de trasformar un pasado triste en un futuro feliz).
Y, ¿saben qué? Encontramos que en este intento valió la pena encontrarnos. Porque nos hizo sentir mejor, y recordar que nuestra historia se escribe todos los días, todas las noches, todos los ratos. Ahora mismo. Dale.
Ayúdenme y te ayudo. ¿Lo seguimos intentando? Tal vez faltes vos en esta imagen, ¡pero es a quien abrazamos muy fuerte!