Nicola se habĂa casado con Brett Harcourt, pero eso no parecĂa significar nada para Marietta, su exesposa, que buscaba afanosamente una reconciliaciĂłn con Ă©l, ni para la nueva y atractiva socia del bufete, que habĂa puesto en Ă©l sus miras. Aunque Nicola tuviera la justicia de su parte, era evidente que Brett no la amaba. Se habĂa casado por compromiso, para cuidar mejor de ella, pero nunca habĂa sugerido siquiera que compartieran la cama. Al lado de aquellas dos sofisticadas mujeres no tenĂa la menor oportunidad. Y, sin embargo, ella amaba a Brett, le gustaba administrar su casa y cuidar de sus hijos. HabĂa llegado el momento de demostrarles a todos, y a Brett el primero, quiĂ©n era su mujer de pleno derecho.