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Cuentos negros de Cuba

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La primera ediciĂłn cubana de este libro Cuentos negros de Cuba, de Lydia Cabrera, data de 1940. Estos relatos fueron recopilados por esta antropĂłloga a partir de los cuentos tradicionales africanos transmitidos oralmente en Cuba. El propĂłsito de Lydia Cabrera es enaltecer los orĂ­genes yorubas y rescatar la tradiciĂłn cultural de raĂ­ces africanas. La mayorĂ­a de los cuentos de origen yoruba son esencialmente relatos religiosos. Alterna tanto los fragmentos de cĂĄnticos como los coros, los rezos y los cantares folclĂłricos, las conversaciones en bozal o lucumĂ­ lengua derivada del yoruba originada en Cuba y usada como lengua litĂșrgica de la santerĂ­a.

Tras su primera publicación en francés de los Cuentos negros de Cuba, Alejo Carpentier escribió:

Acaba de publicarse en ParĂ­s un gran libro cubano. Un libro maravilloso. Un libro que puede colocarse en las bibliotecas al lado de Kipling y Lord Dunsany, cerca del Viaje de Nils Holgersson, de Selma Lagerlöf
 Y ese libro ha sido escrito por una cubana. ÂżPercibĂ­s toda la importancia del acontecimiento?
 Los Cuentos negros de Cuba de Lydia Cabrera constituyen una obra Ășnica en nuestra literatura. Aportan un nuevo acento. Son de una deslumbradora originalidad. SitĂșan la mitologĂ­a antillana en la categorĂ­a de los valores universales
 Conquistan un lugar de excepciĂłn en la literatura hispanoamericana. Y, como obra de mujer, crea un precedente
 Lo raro es hallar en nuestro continente una escritora ĂĄvida de explorar nuestras cosas en profundidad, esquivando aspectos superficiales para fijar hombres y mitos de nuestras tierras con esa finĂ­sima inteligencia femenina
 El tipo de escritora a lo Selma Lagerlöf, a lo Emily Bronte, es casi desconocido en AmĂ©rica.

Lydia Cabrera (1899-1991) fue escritora y activista literaria, estudiosa e investigadora de la cultura afrocubana. Consagrada como la pionera y mĂĄs alta autoridad en el tema de santerĂ­a y otras religiones. Los Cuentos negros de Cuba son el primer libro que publicĂł. Con este tĂ­tulo Lydia encontrĂł su voz, su identidad como autora y empezĂł su vasta obra dedicada a la cultura afrocubana.